Entradas

Umberto Eco, Il nome della rosa

Imagen
El arte de la novela, 3 Martes, 24 de mayo 2016             Dice Raffaele Pinto que para Umberto Eco siempre es posible interpretar el mundo, desenredarlo. Es posible que sea por esto por lo que su primera novela pertenece al género policíaco. En El nombre de la rosa (1980) planea un tema fundamental que es la lujuria del conocimiento, que produce placer y es más peligrosa que la lujuria de la carne.   El buen filósofo duda de la posibilidad de que se pueda entender el mundo, que exista un orden que establezca alguna serie de relaciones. Antes de escribir su primera novela, Umberto Eco era un estudioso de Filosofía y un artífice de la Semiótica, disciplina que estudia los signos y los códigos o sistema de relaciones que se establecen entre ellos. Pero antes de descubrir su vocación como semiótico, Eco se formó como estudiante de filosofía medieval, con una tesis sobre la teoría estética de Tomás de Aquino en la que llega a descubrir un sistema estético por el cual se entien

Carlo Emilio Gadda, Quell merdé hurrible de Via Merulana

Imagen
El arte de la novela, 3 Martes, 17 de mayo 2016   Se trata de una novela  policíaca  de 1957, traducida por Juan Ramón Masóliver como El zafarrancho aquel de Vía Merulana , en Seix Barral. En 1959, Pietro Germi dirigió la adaptación al cine con el título de Un maldito embrollo , que se convirtió en un clásico del género  policíaco  del cine europeo. El profesor de literatura Raffaele Pinto es el ponente de esta tarde. Abre su exposición con algunos de los rasgos de la novela  policíaca , por ejemplo que lo más importante es el final, porque siempre esperamos descubrir quién es el asesino. Pero a continuación abre el arco a la novela como representación del mundo, de la realidad.  Y es ahí donde el género policiaco introduce un elemento de ruptura de la coherencia, una violenta transgresión.    La formación técnica de Gadda (se formó como ingeniero obligado por su madre) le ofrece una manera de ver el mundo asentada en la ciencia. Espera entender la realidad pero frac

Medardo Fraile. Cuentos de verdad

Imagen
Medardo Fraile 1925-2013, escritor de la generación de los 50, la de Sánchez Ferlosio y Martín Gaite. Gran cuentista, definía el cuento como “un puñetazo lleno de realidad posible”. Es una lectura que impresiona como en ocasiones la realidad lo hace. Son cuentos que te dejan hipnotizado, algunos de ellos muy cortitos, con un lenguaje extremadamente cuidado, la palabra escogida, “la voz definitiva mil veces repensada”. En algunos no pasa nada, o aparentemente. Son muy buenos:  Ojos inquietos, El álbum, El caramelo de limón.  Me propuse leer más títulos de su obra y también indagar en su teoría sobre el cuento, en su poética. Es muy amigo de la naturalidad y la sencillez, pero a la vez, con un uso exquisito de la lengua.  Utiliza todos los recursos de la narración: el monólogo, el diálogo, la primera persona, el narrador omnisciente, el narrador testigo dentro y fuera del relato. Son magistrales sus ideas sobre el cuento como género, sobre su doble mensaje: lo expresado más l

LUVINA, un cuento de Juan Rulfo

Imagen
Es un cuento perteneciente al libro El llano en llamas (1953) . Son relatos de tristeza, de pobreza, de desposeídos. “Luvina” presenta una estructura dialogada, pero en realidad no pasa nada. Es un relato de situación donde todo lo que se narra es evocativo. El narrador es un hombre que se está quedando dormido borracho. Está contando algo en una cantina. Luvina es la imagen de la desolación. A partir de presentar una situación particular de un pueblo mexicano abatido por la soledad, el lector es capaz de intuir una situación similar para cualquier pueblo del mundo. La atmósfera da el ambiente, y es una atmósfera relacionada con Pedro Páramo. “…Dicen los de allí que cuando llena la luna, ven de bulto la figura del viento recorriendo las calles de Luvina, llevando a rastras una cobija negra; pero yo siempre, lo que llegué a ver, cuando había luna en Luvina, fue la imagen del desconsuelo…siempre.” Es la evocación de un lugar fantasmagórico, irreal. Utiliza el recurso del c

Marguerite Yourcenar, Memorias de Adriano

Imagen
El arte de la novela, 3 Martes, 3 de mayo 2016             Las Memorias de Adriano , de la novelista de origen belga Marguerite Yourcenar (1903-1987) se publicaron en 1951. Se trata de unas memorias imaginarias a las que vuelvo a menudo en busca de las frases subrayadas en varias lecturas. La primera sorpresa agradable ha sido constatar el recuerdo de que mi vieja edición de la novela (1989), de Círculo de Lectores, es la traducción del francés original que hizo Julio Cortázar en 1955. Releo las lúcidas palabras de Adriano, con sesenta años; cuando, tras una visita a su médico Hermógenes, le confiesa a su “Querido Marco”: He llegado a la edad en que la vida, para cualquier hombre, es una derrota aceptada.             María del Mar García López, la ponente de esta tarde, se presenta ante una sala como siempre abarrotada. Dice que no es una especialista en la obra de Yourcenar, aunque se ha documentado para la charla de hoy. Se presenta en categoría de lectora: Soy una l

Kauzo Ishiguro, The Remains of the Day. (Lo que queda del día)

Imagen
El arte de la novela, 3 Martes, 19 de abril 2016 Vuelvo a clase y la sala está llena. Parece que repunta el interés por la literatura. Es abril y las tardes se alargan, se hacen elásticas e invitan al paseo por esta ciudad que estrena vestido lleno de flores y de luz. Hoy acabé de leer el cuento de Virginia Woolf, “La sociedad”, escrito en 1921. He tomado algunas notas sobre las mujeres y sobre la ficción. Una dice: “La ficción es el espejo de la vida”. Otra de “un grupo de seis o siete reunidas después del té”, que antes de despedirse “acordamos que los objetivos en la vida eran producir buenas personas y buenos libros”. Aquí estamos reunidas bastantes más personas. Sí, es cierto. Repunta el interés. Buenas tardes. A Andreu Jaume le cuesta silenciar la sala. Hoy vamos a hablar de una novela muy inglesa, escrita por un japonés, Kauzo Ishiguro, The Remains of the Day . Destaca rápidamente la maestría en la creación de la voz narrativa, un verdadero prodigio del estilo el

Abril o un paseo por librerías

Imagen
Abril ha cubierto las calles de la ciudad de pétalos alados y las mesas de las librerías de novedades. Llega Sant Jordi y en Barcelona se inicia con una vitalidad renovada la liturgia de la literatura. Abril ha venido para quedarse y llega siempre cargado de libros, a las librerías y a mi casa, porque en pocos días he comprado varios títulos y he apuntado algunos otros ineludibles o imperdibles, como se dice ahora.             Durante estos días he leído la última ¿novela? De Enrique Vila-Matas, Marienbad eléctrico , que J.A. Masoliver reseña en La vanguardia: “Toda la narratividad de esta novela está en lo que tiene de vertiginoso, de continuos desplazamientos de un centro a otro para confirmar con Perec, que toda novela es infinita.” También he empezado dos libros, las memorias de Jaime Gil de Biedma, editadas por Andreu Jaume y el ensayo de Svetlana Alexiévich, Premio Nobel de Literatura 2015, a quien espero conocer el próximo mayo en el CCCB. Los Diarios 1956-1985 de Jaime G